Desde muy pequeña he sentido un profundo amor por la naturaleza y sus habitantes y una necesidad vital de estar cerca de ella.

Desde muy pequeña he sentido un profundo amor por la naturaleza y sus habitantes y una necesidad vital de estar cerca de ella.

Mi salud delicada por entonces, nos llevó a la familia, por recomendación médica y gracias a mis padres, a estar en contacto permanente con la naturaleza los fines de semana y las vacaciones durante toda mi infancia y adolescencia.

 Tuve la suerte de tener una madre pionera en la vida saludable que nos enseñó y familiarizó ya desde pequeños a una vida sana (compraba la primera verdura ecológica en los 80’!) y nos llevaba al homeópata y médica naturista para sanarnos.

Mi padre, también una persona avanzada a su tiempo, compaginaba su trabajo con su pasión por el crecimiento personal y ejercía de instructor Dale Carnegie en sus ratos libres, lo que también me inspiró en mi propio camino.

Ya de adulta y viviendo y trabajando en la ciudad, seguí manteniendo esas escapadas a lo verde hasta que decidí dejar todo, ir a vivir un año a un lugar todavía más verde y salvaje (Australia) y volver con la clara convicción de afincarme definitivamente en el campo en plena naturaleza y en mi tierra natal, en 2001.

Y desde este lugar inicié mi nuevo proyecto de vida en total coherencia conmigo misma. Recuperando una salud que había perdido por falta de conexión a través de una vida mucho más tranquila y  que a la vez demandaba de mi energía y fuerza para afrontar todos los retos con los que la naturaleza tanteaba constantemente mi deseo de seguir aquí en la finca. El huerto, las abejas, la total autosuficiencia energética, los animales, los árboles frutales, etc.

La alimentación y la cocina sana y feliz también forman parte de esa atención y otra de mi pasión.

Aunque ser madre de un Sol al que parí en casa y crié de la forma más respetuosa y sana posible,  ha sido una de las formaciones de Vida más potentes y completas en las que me he examinado (¡).

Me siento profundamente agradecida por estar donde estoy y dedicarme a lo que me dedico, cuidándome y cuidando a las personas que así lo deciden.

Espero poder acompañarte a ti también!